Pyongyang censuró con dureza, el lunes 4 de febrero, a Tokio por su actitud ante el conflicto de radares con Seúl y la controversia suscitada por los vuelos amenazantes de sus aviones contra buques surcoreanos. Afirmó que el comportamiento del Gobierno japonés delata la ambición invasora y expansionista que siempre tuvo ese país.
En concreto, el medio a cargo de la propaganda exterior de Corea del Norte, Uriminzokkiri, publicó un artículo alegando que es obvio que lo que intenta Japón es agravar a propósito sus relaciones militares con Corea del Sur. Agregó que los nipones acostumbraban codiciar lo ajeno y cometían cruentas invasiones, y que los últimos hechos reflejan sus pretensiones de reincidir.
Asimismo, el diario Tongil Sinbo definió los recientes vuelos rasantes de los aviones de patrulla marítima de Japón contra buques surcoreanos como una clara provocación militar que afecta el clima de paz en la península coreana.