El presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, anunció el lunes 7 que renunciará a su cargo, tres años antes del fin de su segundo mandato.
Mediante un comunicado y a través de su cuenta de Twitter anunció que dejará su cargo el 1 de febrero para unirse a una empresa privada de inversiones en infraestructuras en países en desarrollo. Definió como "un gran honor" haber servido como presidente en una institución repleta de personas abocadas a la misión de acabar con la pobreza extrema del mundo.
Kim, estadounidense de origen coreano, fue nombrado presidente del Banco Mundial en 2012 por un primer mandato de cinco años, siendo el primer asiático en ostentar dicho cargo, mientras que su segundo mandato comenzó en julio de 2017.
Al respecto, la agencia Reuters divulgó que dimite por motivos personales y no por presiones del Gobierno de Trump.
No obstante, varios medios estadounidenses, incluidos Wall Street Journal y AP, auguran que la inesperada dimisión de Kim podría desencadenar una feroz batalla entre la Administración de Trump y otros países que han venido quejándose de la influencia que Estados Unidos ejerce sobre el Banco Mundial.