El primer ministro japonés, Shinzo Abe, expresó el domingo 6 su profundo lamento por las medidas legales interpuestas a título particular por víctimas surcoreanas del trabajo forzado, impuesto por Japón en tiempos de guerra, contra una firma japonesa.
Durante un debate de la emisora NHK, Abe dijo lamentar profundamente que los demandantes coreanos traten de confiscar los activos de una empresa nipona en Corea para recibir una indemnización.
Subrayó que el Gobierno japonés toma en serio este asunto y los ministerios pertinentes valoran medidas concretas para responder al movimiento de víctimas surcoreanas, en base a normas internacionales.
El premier nipón reiteró la posición oficial de Japón que remite a la firma de un tratado de normalización de relaciones bilaterales entre Seúl y Tokio en 1965, que puso fin a todas las responsabilidades de la era colonial, alegando que las recientes resoluciones del Tribunal Supremo de Corea del Sur son inaceptables a la luz del derecho internacional.
El año pasado, el máximo tribunal surcoreano condenó a la empresa Nippon Steel & Sumitomo Metal y Mitsubishi Heavy Industries indemnizar a diversas víctimas surcoreanas sometidas a trabajos forzados durante el dominio colonial japonés.