Se reformarán la Orden Ejecutiva de la Ley de bienestar de personas discapacitadas, así como algunos reglamentos relacionados para suprimir el sistema de categorización de discapacidades y establecer un programa de ayudas personalizadas.
Actualmente en Corea del Sur, el Gobierno dispone de un esquema que clasifica las discapacidades según su tipo y grado en seis categorías, según las cuales brinda servicios de bienestar diferenciados. Sin embargo, este sistema ha sido largo tiempo objeto de feroces críticas por dividir a las personas con discapacidad en base a criterios meramente teóricos y médicos, sin considerar las características y necesidades de cada quien.
Una vez abolidas las categorías, las discapacidades serán únicamente diferenciadas como leves y graves, y las personas que tienen alguna recibirán ayudas y servicios personalizados de acuerdo a su nivel de capacidad de realizar actividades físicas, así como a las condiciones en las que viven.