Al dispararse el número de extranjeros que solicitan asilo en Corea del Sur, las autoridades pertinentes han duplicado sus esfuerzos para trazar medidas de respuesta.
De acuerdo con lo divulgado el sábado 7 por la Agencia de Inmigración de Extranjeros en Incheon, el número de foráneos que solicitaron refugio en este país asiático totalizó 2.320 en 2017, un número 36 veces mayor al del año precedente, cuando hubo tan solo 64 extranjeros que presentaron tal solicitud.
Asimismo, entre enero y mayo de este año, las autoridades recibieron 1,587 solicitudes de refugio, cifra que supone un incremento del 60% en comparación con el mismo período del año pasado. De entre los solicitantes, un 60% son kazajos, uzbekos y rusos, mientras que el restante 40% son, en su mayoría, pakistaníes, tailandeses y egipcios.
En dicha agencia en Incheon hay cuatro examinadores de solicitudes. Sin embargo, los extranjeros traen los documentos a entregar redactados en su propio idioma y, desde luego, en cada episodio de comunicación verbal entre ellos y el personal coreano se necesita la intervención un intérprete. Y son este tipo de factores los que alargan el tiempo de tramitación y examen de documentos.
Así las cosas, un foráneo debe esperar entre seis y diez meses hasta que su solicitud y sus documentos sean revisados. Actualmente el número de dichos extranjeros asciende a unos 2.800, sólo en dicha agencia de inmigración ubicada en Incheon.
No obstante, de los 1.030 solicitantes cuya examinación de documentos concluyó entre enero de 2017 y mayo de 2018, tan solo 21 fueron reconocidos como refugiados, y otros 38 lograron permiso de residencia por razones humanitarias.
Ante el rápido crecimiento de solicitantes de asilo en Corea, el Gobierno de este país simplificará el procedimiento y reforzará el personal dedicado a la revisión de documentos.