Los tripulantes de KTX despedidos en 2015 por un dictamen del Tribunal Supremo organizaron el martes 29 una manifestación frente a dicha entidad. 

El objetivo de la protesta fue cuestionar el fallo que les dejó en la calle, revocando los veredictos emitidos en primera y segunda instancia. En febrero de 2015, el Tribunal Supremo -dirigido por el magistrado Yang Seung Tae- dictaminó que los tripulantes del tren de alta velocidad KTX no eran empleados de la empresa ferroviaria pública Korail, y que debían retornar el salario de demora cobrado tras la sentencia en segunda instancia, que ascendía a unos 100 millones de wones.

Sin embargo, unas recientes investigaciones sobre supuestos abusos de poder cometidos por dicho magistrado, revelan que la dirección del Tribunal Supremo de entonces trató de colaborar con el Ejecutivo con decisiones favorables, mientras convencía a Presidencia de instalar una nueva corte permanente para revisión de sentencias. 

Asimismo, existen similares sospechas sobre el dictamen emitido por el Tribunal Supremo, también durante el mandato de Yang Seung Tae, que clasificó a la Unión Coreana de Docentes y Trabajadores Educativos como sindicato ilegal; fallo que dicha organización calificó de "obscena complicidad entre el Judicial y el Ejecutivo". 

Así, incluso dentro del Poder Judicial crecen las voces en contra el ex jefe del Tribunal Supremo Yang Seung Tae y su entorno. Al respecto, el actual magistrado a cargo del Supremo, Kim Myeong Su, apuntó que en breve anunciará un plan de reforma.