Corea del Sur impulsará un plan integral para reducir a la mitad los residuos plásticos para 2030 y aumentar la tasa de reciclaje del actual 34% hasta el 70%.
Al respecto, el Ministerio de Medio Ambiente publicó el jueves 10 los nuevos objetivos en referentes a vertido, separación y reciclaje de residuos, los cuales incluyen medidas concretas para reducir los plásticos en todas las etapas de producción, distribución y consumo de productos.
En la fase de producción, las autoridades prohibirán progresivamente el uso de materiales de envase difíciles de reciclar y, como paso primero, impondrán hasta 2020 el empleo de botellas de plástico sin color o transparentes para agua mineral y otras bebidas. Las empresas que embotellen sus productos en recipientes de plástico de color o envases de material mixto serán obligados a pagar un gravamen por ocasionar costes adicionales de reciclaje.
En la etapa de distribución, controlarán más intensamente el uso de bolsas de plástico y materiales de poliestireno extruido, así como el excesivo empaquetado de los productos en envíos a domicilio.
Para el consumo final, disminuirán un 35% la utilización de vasos desechables y bolsas de plástico hasta el año 2022, además de ofrecer descuentos de hasta del 10% a aquellas personas que lleven su propio vaso a cafeterías y restaurantes de comida rápida.
El Gobierno, considerando que lo más importante para reducir los residuos es educar a los ciudadanos, elaborará una guía sobre cómo desechar y separar correctamente la basura, y también un app para móviles mediante la cual la población podrá consultar sus dudas al respecto.