Casi medio centenar de surcoreanos, ocultos en Filipinas tras cometer algún delito en el país, mayormente fraudes, fueron extraditados en bloque en la tarde del jueves 14 mediante un avión chárter.
La repatriación fue posible gracias a la colaboración con las autoridades judiciales filipinas, después de que los prófugos fueran expulsados por la Oficina de Inmigración local, pues la orden de detención entró en vigor cuando los fugitivos subieron al avión.
Las pérdidas económicas generadas por estos 47 criminales ascienden a 46.000 millones de wones.
Según la Policía Nacional, el destino más frecuentado para escapar durante 2017 fue Filipinas. Hasta finales de noviembre huyeron a dicho país hasta 144 de los 485 prófugos buscados por la Justicia surcoreana.