El Gobierno ha presentado el plan para reformar la organización policial, cuyo eje central busca convertir al Comité Policial -por ahora responsabilidad del Ministerio del Interior y Seguridad Pública- en un organismo de rango ministerial dependiente de la Oficina del Primer Ministro.
Así, el responsable del comité tendrá voz en las reuniones del Consejo de Ministros, y bajo ese organismo se creará una dirección nacional de investigación, que tendrá el mismo estatus que la Policía Nacional. La idea es formalizar un sistema dual, donde las actividades policiales ordinarias mantendrán la estructura de mando ya existente, mientras que las tareas de investigación se asignarán a esta nueva entidad, para atajar posibles intervenciones o arbitrariedades de la cúpula directiva policial durante las pesquisas.
El plan será revisado a nivel interno por la Policía Nacional durante un mes, y posteriormente será presentado como proyecto general en febrero de 2018. Sin embargo, de entrada ya se anticipa controversia, al estar conectado con temas como la ampliación de las policías regionales autónomas y el reparto de facultades de investigación entre Policía y Fiscalía.