El número de pacientes afectados por el calor supera en lo que va de verano las 900 personas, de las cuales cinco han fallecido.
Concretamente, 919 ciudadanos sufrieron por las altas temperaturas desde mitad de mayo hasta el 1 de julio, y fueron diagnosticados con problemas por golpe de calor, calambres térmicos, síncope por calor y agotamiento por calor.
Durante el último lustro, 5.901 personas padecieron enfermedades derivadas del calor, incluyendo 58 fallecidos. De ellos, un 56% eran mayores de 50 y un 43% se vio afectado trabajaba o realizaba actividades agrícolas al aire libre.