El salario mínimo de 2018 quedó finalmente fijado en 7.530 wones por hora, un 16,4% más que en 2017. Es la primera vez en 11 años que se acuerda un aumento de dos dígitos, que incluso duplica el promedio de los últimos cinco años, del 7,4%.
Así, la paga mínima mensual de un trabajador con un contrato de 40 horas semanales será de 1.573.770 wones, unos 220.000 wones más que este año. El incremento afecta a un máximo de 4.630.000 empleados, que también verán aumentos en la baja por maternidad y desempleo, pues se calculan tomando como base el salario mínimo.
En la votación del Comité de Salario Mínimo, la subida a 7.530 won/h se aprobó por 15 votos a favor y 12 en contra.