El jueves 29 tuvo lugar la vista preliminar del juicio contra las 11 personas acusadas por el escándalo Choi Soon Sil.
Uno de los acusados, el ex viceministro de Cultural, Kim Jong, negó haber presionado a Samsung a donar 1.600 millones de wones para la creación de un centro de capacitación infantil en deportes invernales.
Declaró que, en su opinión, fue la propia jefa de Estado, Park Geun Hye, quien solicitó a Samsung Electrónica apoyo económico, durante una reunión privada con el ejecutivo Lee Jae Yong.
En tanto, Jang Si Ho, sobrina de Choi Soon Sil y presuntamente cómplice de Kim Jong en múltiples irregularidades, expresó que si bien aceptó dinero de Samsung, el conglomerado hizo esa aportación voluntariamente y no por presión.
Por su parte, la protagonista del caso, Choi Soon Sil, negó haber presionado a Samsung a cambio de recibir sumas astronómicas para numerosas fundaciones, así como las inversiones en empresas particulares relacionadas con ella.