El descontento de la ciudadanía ante el escándalo protagonizado por Choi Soon Sil va en aumento, y cada vez más agrupaciones y personas están emitiendo manifiestos o participando en protestas.
Así, las víctimas de la esclavitud sexual de la Segunda Guerra Mundial urgieron a la renuncia de la presidenta Park Geun Hye y a sancionar a los involucrados, mientras que la Unión de Agrupaciones Femeninas de Corea, y otras 40 formaciones vinculadas, también emitieron un comunicado exigiendo a la jefa de Estado abandonar su cargo y aclarar la verdad sobre el caso.
En tanto, grupos de catedráticos y estudiantes continúan emitiendo manifiestos y celebrando protestas pacíficas con velas en los campus universitarios; al igual que diversas agrupaciones políticas y religiosas, que criticaron enérgicamente el caos nacional provocado por Choi Soon Sil que sacude al país.