Se ha revelado que muchos norcoreanos viven con las remesas de dinero que desde el exterior les envían los familiares que desertaron.
En el caso de los que residen en Corea del Sur, 6 de cada 10 desertores envían entre un millón y tres millones de wones a sus parientes en el Norte; cifra que equivaldría a unos 480 salarios mensuales norcoreanos, calculando que un trabajador del Norte cobra unos 2.500 wones al mes, pues con el cambio actual, un millón de wones surcoreanos correspondería a 1,2 millones wones norcoreanos.
Se estima que los más de 30.000 desertores que viven en Corea del Sur envían a sus familiares en el Norte un mínimo de 10 millones de dólares al año, unos 11.000 millones de wones.