Al menos 40 norcoreanos enviados al extranjero por el régimen de Pyongyang para trabajar y obtener divisas, murieron durante este año por accidentes, enfermedades o suicidio.
Según informaron el martes 20, diversos expatriados norcoreanos sufrieron accidentes laborales en sus lugares de trabajo por falta de equipos de seguridad, y también por excesiva carga laboral. Asimismo, aumenta constantemente el número de personas que opta por quitarse la vida ante la gran presión psicológica que generan motivos como un estricto control y supervisión, la explotación salarial y un trato infrahumano por parte del régimen norteño.
Dichas fuentes afirman que al menos 40 trabajadores norcoreanos fallecieron en Rusia, Kuwait, China, Qatar, Angola y Mongolia, entre otros países. No obstante, Angola y Rusia destacan por un elevado de número de muertes. En Ruanda, la capital angoleña, 20 norcoreanos fallecieron por fiebre amarilla, al no haber sido vacunados contra dicha enfermedad, mientras que en el país eslavo otras 13 murieron por accidentes, caídas o suicidio.
Pero los expatriados norcoreanos también sufren explotación salarial. Por poner un ejemplo, aquellos que trabajan en China recientemente vieron incrementada la cuota mensual de aportación al régimen norteño de 100 a 300 dólares estadounidenses, mientras que su salario medio en dicho país se estima en 400 o 500 dólares mensuales.
Actualmente, alrededor de 58 mil norcoreanos trabajan en unos 40 países del mundo, y su aportación al régimen asciede a un 80% de su salario. Así, estimando un promedio de mil dólares al mes por cada trabajador norcoreano en el extranjero, el Gobierno de Kim Jong Un obtendría un total de 550 millones de dólares por dichas aportaciones.