El seísmo de mayor magnitud de la historia coreana, ocurrido el lunes 12 en la ciudad milenaria de Gyeongju, donde se concentran numerosos patrimonios culturales designados por el Estado como tesoros, ha causado gran preocupación en los círculos arqueológicos.
De entre los bienes culturales ubicados en dicha urbe, el observatorio astronómico Cheomseongdae sufrió fuertes sacudidas, pues está ubicado bastante cerca del epicentro y ya estaba inclinado unos 20cm respecto a su eje central. Aunque no se han detectado daños visibles, presumiblemente porque su estructura es sismo-resistente, los responsables están realizando una minuciosa inspección de dicho observatorio, designado como Tesoro Nacional Nº31.
Por otro lado, la gruta budista artificial construida en las laderas del monte Toham, Seokguram, Tesoro Nacional Nº24, tampoco se vio gravemente afectada por el terremoto, a excepción de algunos trozos rocosos que cayeron en su entrada.
Según la Administración de Patrimonios Culturales, el tejado del templo Bulguksa, Tesoro Nº 1744, así como los muros que rodean las tumbas Oreun de la dinastía Silla y la academia confuciana Seoak Seowon, presentaban ligeros daños.
La entidad responsable de administrar estos bienes culturales continúa investigando los posibles daños causados por el terremoto en dicho patrimonio con instrumentos de precisión.