Las investigaciones in situ realizadas por KBS confirman que los norcoreanos especializados en costura que trabajaban para las empresas surcoreanas en el Complejo Industrial de Gaseong, próximamente tendrán un nuevo empleo en las fábricas textiles ubicadas en la frontera entre China, Rusia y Corea del Norte.
Según lo dado a conocer, en esta zona fronteriza están establecidas numerosas fábricas de manufactura dedicadas a la indumentaria, y a fecha de hoy están trabajando allí unos 1.500 norcoreanos.
Actualmente, la empresa más grande de China dedicada a la costura está construyendo su planta en esta región, y una vez finalizadas las obras en octubre necesitará de unos 20.000 nuevos operarios, de los cuales al menos unos 5.000 serán suministrados por Corea del Norte.
Muchos de las costureros norcoreanas son veteranas que trabajaron muchos años en las fábricas del polígono industrial de Gaesong y tras el cierre de este complejo a causa de los conflictos intercoreanos el régimen comunista ha estado buscando nuevas fuentes para su ingreso de divisas.
Gracias a la veteranía de los trabajadores norteños, también ha elevado su salario, hasta cobrar unos 500 dólares mensuales.