Se ha procedido a inaugurar la fundación para las víctimas de la esclavitud sexual, cuyo establecimiento fue decidido entre los gobiernos surcoreano y japonés a finales del año pasado.
La entidad fue bautizada como 'Fundación para la reconciliación y la recuperación' y el jueves 28 la junta directiva celebró su primera reunión sobre la gestión y labores futuras.
No obstante, la polémica sobre su constitución perdura, pues las propias víctimas de la esclavitud sexual se oponen a la creación de la fundación y exigen a Japón asumir la responsabilidad legal que le corresponde.
Es incierto, además, cuándo el gobierno nipón entregará la contribución de 1.000 millones de yenes que prometió ofrecer a la fundación. Respecto a este financiamiento, hay voces que plantean la posibilidad de que en este proceso se aluda nuevamente al desmantelamiento de la estatua en homenaje a las esclavas sexuales, ubicada frente a la Embajada de Japón en Seúl.