El pasado día 10 falleció Yoo Hee Nam, a sus 88 años, siendo una de las mujeres registradas como víctimas de esclavitud sexual. La anciana fue llevada en su juventud forzosamente a Japón, en 1943, y regresó al país tras la guerra; pero desde entonces sufría insomnio y otras dolencias cardíacas por las secuelas de la esclavitud sexual.
Aunque fue diagnosticada con cáncer de pulmón en 2009, la anciana Yoo continuó luchando con otras víctimas para conseguir una disculpa oficial y una compensación legal por parte del gobierno japonés, para intentar reparar el honor y la dignidad de las víctimas.
Tras fallecer la anciana Yoo, de las 238 víctimas de esclavitud sexual registradas por el gobierno surcoreano, tan solo 40 permanecen con vida.