A diferencia de la década de los ochenta y los noventa, cuando la principal causa del divorcio era la violencia familiar, desde 2010 hasta la fecha, el motivo más frecuente alegado es la diferencia de personalidad.
El Centro de Ayuda Jurídica sobre Relaciones Familiares de Corea publicó el día 16 un informe sobre los cambios producidos en los hogares, tomando como base las consultas realizadas durante los últimos 60 años. El documento concluye que, con el paso del tiempo, las causas de divorcio han sufrido variaciones.
Entre los años 60 y 90, las principales razones para finalizar una relación matrimonial eran los malos tratos y la violencia, principalmente del hombre hacia la mujer. Pero desde el comienzo de la década del 2000, las parejas se divorcian más por problemas sentimentales, como falta de diálogo, incompatibilidad de caracteres o diferencia en los gustos.