El Gobierno de Corea del Sur ha anunciado medidas concretas para reducir el nivel de micropolvos contaminantes, adoptadas en reunión de gabinete en la mañana del viernes 3.
Entre ellas, destaca el refuerzo de la normativa sobre coches diésel, incluyendo la renovación anticipada de aquellos vehículos con más de 10 años y que carezcan de sistema de control de emisiones; así como la aplicación de un impuesto extra para los propietarios de autos diésel, incluso entre aquellos que cumplan las normativas Euro 5 y Euro 6.
Durante la reunión, el primer ministro Hwang Kyo Ahn decidió también limitar el acceso de vehículos diésel antiguos a la zona capitalina; así como cerrar las plantas termoeléctricas de carbón que hayan estado operativas durante más de 40 años, para reemplazarlas por centrales eléctricas de gas natural licuado.
No obstante, el Gobierno no aumentará el precio de diésel -para reducir la polución atmosférica provocada por micropolvos contaminantes- al no haber podido llegar a un acuerdo entre los ministerios.