Mientras Pyongyang se esmera en no perder el impulso político generado por el Congreso Nacional del Partido de los Trabajadores, los integrantes de la convención juraron lealtad al régimen. 
Asimismo, organizaron varios eventos que instan a seguir al partido, como una presentación conjunta ofrecida por varias compañías artísticas, celebrada en Pyongyang el miércoles 11, y a la que acudieron los comisionados permanentes de la oficina política del Comité Central de Partido de los Trabajadores. 
También en la misma fecha, se celebró una ceremonia de juramento, donde los presentes se comprometieron a ser los mejores camaradas, al consagrar lealtad tanto a Kim Jong Un como a sus ideologías.