Unos cien mil norcoreanos se reunieron el martes 10 en la plaza Kim Il Sung en el centro de Pyongyang, para festejar la clausura del 7º Congreso Nacional del Partido de los Trabajadores y el nombramiento de Kim Jong Un como presidente. 
La Televisión Central de Corea del Norte retransmitió el evento, mientras el líder norcoreano -ataviado con un traje negro- seguía desde la tribuna al público congregado en la plaza. A su lado estaban otros altos cargos del régimen norcoreano como el jefe del Buró Político del Ejército, Hwang Pyong So, y el secretario del único partido norcoreano, Choi Ryong Hae. 
Durante la convención, el presidente de la Comisión Permanente de la Asamblea Popular Suprema, Kim Yong Nam, aseguró que Corea del Norte había logrado consolidar su estatus de potencia nuclear tras los recientes ensayos balísticos y nucleares, al tiempo de alentar a los presentes a acelerar el proceso de la revolución, al cumplir fielmente las órdenes de Kim Jong Un.