La Agencia Central de Noticias de Corea del Norte informó el viernes 25 de que su líder, Kim Jong Un, dirigió el día anterior un entrenamiento de artillería que simulaban ataques de precisión contra la casa presidencial Cheongwadae y las principales entidades gubernamentales de Corea del Sur. 
En dicho ejercicio militar, que según la agencia norcoreana fue el de mayor envergadura en la historia de ese país, se usaron más de 100 cañones de artillería de largo alcance, incluyendo los autopropulsados de 170mm. 
Kim Jong Un elogió la alta precisión del simulacro, y ordenó al Ejército Popular estar preparado para reducir a cenizas las principales entidades de Seúl, tan pronto como se emita esa orden de ataque. 
Durante el ejercicio militar, Kim Jong Un estuvo acompañado de altos dirigentes del Ejército norcoreano, entre ellos el jefe del Buró Político del Ejército de Corea del Norte, Hwang Pyong So, y el ministro de Seguridad Pública, Ri Myong Su.