Tras confirmarse que los mandatarios de Corea del Sur y Japón acordaron acelerar los procedimientos para resolver lo antes posible el problema de las esclavas sexuales, Pyongyang también ha exhortado a Tokio a compensar a las norcoreanas que fueron obligadas a servir sexualmente a los soldados nipones en tiempos de guerra.
La Agencia Central de Noticias de Corea del Norte divulgó el día 6 el comentario del portavoz de su Cancillería, que recordó que no solo mujeres del Sur sino también del Norte sufrieron abusos por parte del Ejército japonés.
El Ministerio de Exteriores criticó a Tokio por violar seriamente los derechos humanos, al recalcar que el Gobierno nipón forzó a más de 200.000 mujeres a trabajar como esclavas sexuales durante el imperialismo.
Agregó que el crimen más cruel es el que sus protagonistas desean resolver solo con parte de las víctimas y no con todas, insistiendo en que Japón debe resolver el tema con las dos Coreas.