Las autoridades de las Fuerzas Armadas de Corea del Sur han oficializado su decisión de desplegar operaciones de carácter ofensivo en la frontera, en vista de la beligerante conducta del Ejército norcoreano y, concretamente, tras la explosión de unas minas norcoreanas en la Zona Desmilitarizada.
El Ministerio de Defensa presentó el jueves 10 un informe de trabajo ante la Asamblea Nacional, como parte de la interpelación parlamentaria al Gobierno, en el que confirma su determinación de intensificar las operaciones militares en la Zona Desmilitarizada contra las provocaciones norcoreanas.
Hasta ahora el Ejército surcoreano ha mantenido una actitud más bien pasiva en sus operaciones fronterizas; pero de ahora en adelante, cambiará su estrategia y adoptará acciones más ofensivas, como incluso derribar a los soldados norcoreanos que crucen la línea de demarcación militar.
En cuanto a la posibilidad de que Corea del Norte lance un misil de largo alcance alrededor del 10 de octubre, fecha en la que conmemora los 70 años del nacimiento de su Partido de los Trabajadores, el Ministerio de Defensa surcoreano ha afirmado que las probabilidades existen, máxime considerando que las obras de construcción de la plataforma de lanzamiento en Dongchang-ri finalizaron hace poco.