Pyongyang ha negado estar detrás de las minas terrestres en la Zona Desmilitarizada que explotaron a principios de este mes hiriendo a soldados surcoreanos y exigió a Seúl mostrar evidencias.

El Estado Mayor Conjunto de Seúl dio a conocer el viernes 14 que el Ejército de Corea del Norte envió un mensaje por teléfono en el que expresó no tener relación alguna con las explosiones de minas terrestres y que las acusaciones son parte del plan de Seúl contra Pyongyang.

También denunció la reanudación de la emisión de mensajes mediante altavoces en zonas de la frontera intercoreana, calificándola como una provocación militar imprudente. La respuesta del Norte llegó 10 días después de que dos soldados surcoreanos fueron mutilados por minas terrestres durante una misión de reconocimiento en la parte sur de la zona desmilitarizada, y cuatro días después de que el Sur señalara al Norte como el responsable.

Poco después de recibir el mensaje del Norte, el ejército de Corea del Sur respondió en una carta , condenando la negación de Corea del Norte de su acto de provocación. El Estado Mayor Conjunto advirtió que tomará represalias en caso de nuevas instigaciones de Corea del Norte.