Corea del Norte ha rechazado la solicitud de Corea del Sur de repatriar inmediatamente a los dos ciudadanos detenidos en el territorio comunista por presuntas actividades de espionaje; al tiempo de no aceptar el comunicado enviado por el Gobierno de Seúl.

La Administración de Park Geun Hye puntualizó el día 27 que la declaración de Pyongyang de haber atrapado a dos agentes secretos surcoreanos carece de fundamento, e instó a Corea del Norte a liberar a esas dos personas, arrestadas por sospechas de espionaje.

Asimismo, mediante un comunicado, criticó que Corea del Norte haya detenido a dos surcoreanos sin una notificación previa y anunciado públicamente que son espías. 

Previamente, el régimen comunista hizo públicas algunas imágenes en las que aparecen dos surcoreanos en rueda de prensa tras ser arrestados por espionaje. No obstante, uno de los detenidos, Kim Kuk Gi no reconoció ser un agente secreto de Inteligencia surcoreana, sino un misionero que trabaja en China, en la región fronteriza con Corea del Norte. 

Tras estos hechos, actualmente son tres los surcoreanos que están detenidos en Corea del Norte por presunto espionaje. En 2013 encarcelaron a un misionero surcoreano por el mismo cargo.