Jeffrey Lewis, director del Centro de No Proliferación James Martin de Estados Unidos, ha divulgado un informe en el sitio web 38 North, donde especula que -presuntamente- el nuevo misil estratégico lanzado por el país comunista el pasado agosto, podría ser una modernización del SS-21, un antiguo modelo de la ex Unión Soviética.
Según informan, Corea del Norte ya posee el misil KN-02, de 170 kilómetros de alcance, una versión mejorada del viejo modelo soviético SS-21 cuyo alcance era de 120 kilómetros.
No obstante, el pasado agosto, esta unidad viajó un máximo de 220 kilómetros, por lo que evalúan una mejora en su capacidad. 
El experto sostiene que, tras analizar las imágenes difundidas por medios norcoreanos, como el periódico Rodong, concluye que los lanzamientos de misiles realizados el 14 de agosto y el 26 de junio se llevaron a cabo desde un mismo lugar; quizá desde la localidad de Wonsan, al noreste del país, que opera como complejo de ensayos balísticos.
Agregó que Pyongyang está actualizando los misiles SS-21 y creando nuevas versiones más avanzadas. Por ello explica que el régimen podría realizar nuevas pruebas nucleares, para probar su alcance.