Una autoridad del Ministerio de Reunificación Nacional de Corea del Sur ha manifestado que la postura básica del Gobierno es que Corea del Norte debe respetar el acuerdo ya establecido entre Seúl y Pyongyang, para organizar una segunda reunión intercoreana de alto nivel.
Este comentario fue realizado después de que el domingo 12 el régimen norcoreano advirtiera de que la celebración de dicho encuentro podría cancelarse, al criticar la distribución de folletos de propaganda política por parte de organizaciones civiles surcoreanas.
En esta línea, explicó que aún no está decidido si las dos Coreas mantendrán una reunión de trabajo o intercambiarán sus posturas por escrito durante esa segunda ronda de contactos de alto nivel; y que Seúl planea entregar pronto a Pyongyang su propuesta sobre una posible fecha y los temas a debatir durante el encuentro.
En lo concerniente a los panfletos propagandísticos arrojados por ONGs surcoreanas hacia Corea del Norte, esta autoridad ha declarado que es una cuestión sujeta al libre juicio de las organizaciones civiles; si bien el Ministerio de Reunificación siempre recomienda prudencia.