Corea del Norte ha reaccionado oficialmente por primera vez desde el regreso de todo el personal surcoreano que permanecía en el Complejo Industrial de Gaesong.

El domingo 5, la Comisión Nacional de Defensa norcoreana emitió un comunicado en nombre del portavoz de su Oficina de Políticas, en el que condenó el ejercicio marítimo que los ejércitos surcoreano y estadounidense planean realizar esta semana.

En él, dicho órgano del país comunista manifestó que las hostilidades contra su régimen deben detenerse de inmediato y que el parque de Gaesong no se normalizará a menos que tales acciones se interrumpan.

Se especula que dado este panorama es poco probable que Corea del Norte acepte las exigencias del Gobierno surcoreano, al menos por el momento. Lo que Seúl pide a Pyongyang es su consentimiento para reactivar la línea de comunicación intercoreana en el área de tregua Panmunjeom y sacar tanto las materias primas como los productos terminados de las empresas surcoreanas en el complejo de Gaesong.