El jefe de seguridad nacional de la oficina presidencial, Kim Jang Soo, ha declarado que Corea del Norte podría lanzar misiles alrededor del miércoles 10.
Kim dijo creer que el país comunista podría estar planeando provocaciones adicionales, dado que aconsejó a las misiones diplomáticas extranjeras en Pyongyang a abandonar la capital norcoreana hasta esa fecha.
También destacó que debía prestarse atención al reciente traslado de un objeto –que parece ser un misil Musudan- a la costa oriental norcoreana.
La oficina presidencial de Seúl ha afirmado que celebran varias reuniones al día para vigilar la situación en Corea del Norte. También ha hecho hincapié en que el Ejército surcoreano está en firme posición de combate, pero que no hay señales de una guerra frontal.
Sin embargo, el alto cargo ha instado a los norcoreanos a crear oportunidades de diálogo ellos mismos, añadiendo que el Ejecutivo de Seúl no se apresurará a intentar conversar con Pyongyang.