La Voz de América dio a conocer el día 16 que el enviado de la ONU para los derechos humanos en Corea del Norte, Marzuki Darusman, ha pedido a los países vecinos de Corea del Norte apoyo y protección para los desertores de Corea del Norte. Se estima que la mención de las naciones vecinas pueda hacer referencia a China.
Darusman manifestó en un informe anual presentado ante la Asamblea General de la ONU que las norcoreanas desertoras casadas con ciudadanos de terceros países y sus niños están experimentando grandes dificultades. Enfatizó que los países implicados deben proporcionar educación y apoyo social a estas personas.
El representante de la ONU citó a Tailandia como un caso ejemplar. El número de desertores norcoreanos que eligieron vivir en Tailandia aumentó de 40 en 2004 a 2,482 en 2010 gracias a los esfuerzos del Gobierno tailandés por acoger a personas que escaparon del país comunista. Hasta abril de este año los refugiados en ese país alcanzaron los 870.
Darusman también recalcó la necesidad de crear un organismo internacional independiente para vigilar los campos de concentración de prisioneros políticos en Corea del Norte.