El Gobierno de Corea del Sur no alterará su plan de ayudar a los norcoreanos afectados por las lluvias, a pesar de los disparos al agua efectuados el miércoles por Corea del Norte hacia la Línea Limítrofe Norteña en el Mar Amarillo.
Un funcionario del Ministerio de Reunificación Nacional surcoreano informó el jueves 11 que Seúl procederá sin cambios al envío de la asistencia prometida, ya que se trata de una iniciativa de carácter humanitario. Añadió que, si no surgen de forma adicional incidentes extraordinarios, tampoco se interrumpirán los programas de ayuda dirigidos a las clases más vulnerables de Corea del Norte que administran las ONGs surcoreanas.
Sobre la alegación de Pyongyang de que Seúl confundió las operaciones de detonación de sus tropas y las entendió como disparos contra su territorio, la autoridad aseveró que no viene al caso hablar de ello. Afirmó que el Ejército surcoreano tomó medidas firmes y apropiadas, respondiendo a los disparos norcoreanos con otros tantos hacia la frontera marítima como un acto de protesta.