Estados Unidos criticó la eliminación de los precintos de las centrales atómicas norcoreanas y urgió a no reanudar las actividades nucleares. Asimismo, advirtió que con esta decisión se ha generado un resultado más grave. Luis Pintor, portavoz de Estado estadounidense, manifestó que la reanudación de las actividades de las instalaciones nucleares desafía frontalmente el acuerdo con la sociedad internacional. Señaló que Corea del Norte debe respetar el Tratado de Ginebra y que debe desistir del desarrollo secreto de armas nucleares. Antes de esta declaración, Corea del Norte, mediante la Agencia de Noticias Central de ese país, manifestó que Norcorea ha comenzado el trabajo de la eliminación de los precintos de las centrales nucleares para la producción de la energía eléctrica. Informó que fue una medida tomada debido al corte unilateral de petróleo, suministro que ofrecía Estados Unidos para que Norcorea desistiera del programa nuclear. En tanto, la Agencia Internacional de Energía Atómica criticó duramente el accionar norcoreano. Mediante un comunicado señaló que dichas instalaciones son depósito de combustible nuclear y determinó el acto norcoreano como una violación sobre las actividades de inspección de su organización. Por otro lado, Francia lamentó la decisión norcoreana y anunció que está en contacto directo con la AIEA sobre el tema. El Ministerio de Asuntos Exteriores galo añadió que apoya al secretario general de la AIEA, Mohammed Al Baradei, quien había exigido innumerables veces a Corea del Norte que no viole los acuerdos.