El régimen de Pyongyang señaló que la administración de Seúl da prioridad a las influencias extranjeras y por eso es culpable de la interrupción de la 6ta Reunión Ministerial Intercoreana. Diferentes medios de comunicación norcoreanos insistieron que el Sur obstaculizó el encuentro al rechazar la propuesta norcoreana de celebrar la Reunión del Comité para la promoción y cooperación económica en Pyongyang, por lo que no se pudo llegar a ningún acuerdo.
Al respecto, las autoridades del gobierno de Seúl dijeron el día 16 que los argumentos del Norte son un intento de los responsables de los proyectos intercoreanos de transferir la culpa a Surcorea por la interrupción de la reunión. Añadieron que, sin embargo, la delegación norcoreana intentó convencer a los representantes surcoreanos sobre el período y el lugar de la reunión económica y la ministerial. La administración surcoreana interpretó el acto como un camino para librarse de la responsabilidad y una evidencia de la influencia de la fuerza conservadora del Norte.
Por el momento, se cree difícil evitar un período de enfriamiento de la relación entre ambas Coreas y se estima que luego de un tiempo se reanudará el diálogo intercoreano de alguna manera.