Una autoridad del Ministerio de Reunificación Nacional ha informado que Corea del Norte no ha realizado aún anuncios o comentarios oficiales sobre el pesquero surcoreano que secuestró el domingo 8 de agosto.

Según esta fuente, el Gobierno de Seúl baraja tomar las medidas necesarias, incluyendo el envío de un comunicado a Pyongyang, tras verificar tanto el punto en el Mar del Este como el contexto en que se produjo el rapto.

Es posible, asimismo, que Corea del Sur busque la colaboración con China para solucionar el asunto, en vista de que en el barco secuestrado también iban a bordo marineros de ese país vecino.

Sobre este incidente, el líder de Gran Nación en la Asamblea Nacional, Kim Moo Sung, condenó a Corea del Norte por su comportamiento hostil. Declaró que es inaceptable que el régimen comunista haya raptado un barco civil del Sur mientras sigue sin disculparse por el hundimiento del Cheonan y las minas tipo cajón encontradas en ríos surcoreanos.

El legislador oficialista instó al Gobierno de Seúl a movilizar todos los medios posibles para que la solución del asunto no se demore y el pesquero pueda ser repatriado cuanto antes.