Las delegaciones surcoreana y norcoreana se reunieron hoy miércoles en el Complejo Industrial de Gaesong para debatir asuntos relativos a la prevención de inundaciones en el río Imjin.
Al respecto, el Ministerio de Reunificación Nacional de Corea del Sur ha comunicado que el lado norcoreano lamentó la muerte de seis civiles en la descarga de la represa Hwang y dio su pésame a los familiares de las víctimas.
En cuanto a las causas de apertura de diques sin aviso previo al Gobierno surcoreano, los representantes de Pyongyang explicaron que no tuvieron otra alternativa para reducir los daños que el agua podría causar en su territorio.
Las dos Coreas intercambiaron, además, opiniones sobre el uso apropiado del río y buscaron soluciones efectivas para que no se repitan los hechos.
Aunque el régimen comunista no ofreció concretamente ‘disculpas’ sobre la muerte de civiles del Sur, el Gobierno de Seúl acepta como tales el lamento y las condolencias del Norte.