El Gobierno de Corea del Sur decidió problematizar oficialmente el anuncio de Pyongyang sobre que no garantizará el bienestar de los aviones comerciales surcoreanos ante la Organización de Aviación Civil Internacional (ICAO).

Una fuente del Ministerio de Relaciones Exteriores y Comercio divulgó que Seúl tomó tal determinación, considerando que la amenaza militar norcoreana contra los vuelos comerciales de Corea del Sur pone en riesgo la seguridad de la aviación civil.

Esta fuente agregó que la administración seulita está comunicando a las naciones vecinas el contenido del comunicado norcoreano y la postura surcoreana al respecto porque es posible que pasajeros extranjeros estén a bordo de los aviones civiles nacionales.

Por su lado, el Departamento de Estado estadounidense enfatizó que no tolerará de ninguna manera que Pyongyang intimide las actividades de aviación civil y las operaciones comerciales internacionales.

El vocero de la citada cartera de Washington, Gordon Duguid, dijo que la retórica belicosa de Corea del Norte es fútil y adversa a la política de intervencionismo constructivo que desea impulsar Estados Unidos.