El gobierno de Washington ha intensificado la vigilancia sobre Corea del Norte tras conocerse que se prepara para un posible lanzamiento de su misil intercontinental Daepodong 2.
Un funcionario gubernamental que pidió no ser identificado señaló que el Departamento de Defensa estadounidense decidió el pasado día 9 trasladar sus buques de la Marina del Pacifico a un lugar estratégico para seguir de cerca los pasos del régimen norcoreano.
Fuentes del Comando del Pacífico de Estados Unidos también confirmaron que continuarán observando cada movimiento de Pyongyang a través de todos los medios posibles pero evitaron dar detalles al respecto.