Los comentarios del presidente Roh Moo Hyun negando que la Línea Limítrofe Norteña (LLN) sea la frontera intercoreana en el Mar del Oeste han generado una gran controversia en el país.
En una reunión con los jefes de los partidos políticos que tuvo lugar el jueves, el presidente consideró que llamar frontera marítima a la LLN es engañar al público. En cambio, dijo, debería verse a la LLN como aquello que marca el límite de las operaciones navales surcoreanas, mientras que lo acordado por las dos Coreas es la Línea de Demarcación Militar.
En tanto, el principal partido opositor Gran Nación hizo crecer la sospecha sobre la existencia de un acuerdo secreto entre Roh y Kim Jong Il, el líder norcoreano. En este sentido, ese partido dijo que está investigando los motivos políticos detrás del comentario presidencial, así como sus repercusiones, frente a la próxima elección presidencial de diciembre.
El partido Democrático también arremetió contra el comentario, calificándolo como desestabilizador de la seguridad nacional.
Al contrario, el Nuevo Partido Democrático de la Gran Unión se enfrentó al partido Gran Nación, instándole a acabar con lo que describió como “disputas fútiles” y a cooperar en la implementación de los acuerdos alcanzados en la cumbre.
Por su parte, el Partido Democrático Laboral se mostró de acuerdo con la observación presidencial.
Se analiza que la confrontación entre el partido Gran Nación y la oficina presidencial y las fuerzas progubernamentales tendrá influencia en la elección presidencial.
La LLN fue trazada unilateralmente por el Comando de la ONU en 1953 como la frontera marítima occidental de facto. Pero, en 1999, Corea del Norte declaró unilateralmente una nueva frontera que se extiende al sur de la LLN, lo que llevó a una serie de sangrientos enfrentamientos navales en 1999 y 2002, que dejaron un saldo de seis marineros surcoreanos muertos.
Roh declaró que la posición fundamental de Seúl es manejar el asunto de la Línea Limítrofe Norteña conforme al Acuerdo Básico Sur-Norte de 1992. Ese convenio reconoce a la LLN como la frontera de facto, pero deja abierta la posibilidad a futuras conversaciones sobre el asunto.