El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, ACNUR, está evaluando trazar medidas básicas ante la cuestión de los refugiados, a raíz de las continuas entradas de desertores norcoreanos a consulados y embajadas en China. Según fuentes diplomáticas de Ginebra, este cambio se debe a que el tema de los desertores norcoreanos se ha convertido en una fricción entre China y Japón y algunos países han criticado el rol pasivo del ACNUR ante el asunto, poniendo en evidencia la necesidad de establecer contramedidas específicas. El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados ha venido tomando una postura pasiva sin reflejar las cifras reales de los desertores norcoreanos en su informe anual de los refugiados del mundo.