Las pequeñas y medianas empresas surcoreanas, instaladas en el Complejo Industrial de Gaesong en Norcorea, están experimentando dificultades para exportar sus productos al mercado estadounidense.

Una firma que produce partes automotrices indicó haber recibido la petición de sus compradores estadounidenses de reemplazar los productos manufacturados en la zona industrial norcoreana por otros fabricados en su sede de Incheon. Los directivos de la compañía evalúan que será inevitable trasladar la línea de producción de Gaesong a la ciudad surcoreana de Incheon.

Las empresas están preocupadas por la posibilidad de que la percepción negativa de Corea del Norte se extienda aún más a raíz de la prueba nuclear, afectando sus actividades de exportación no sólo a Estados Unidos sino también a otras regiones.