Se dio a conocer que Seúl había comunicado a Pyongyang la “seria preocupación” que tiene con respecto de las señales de un posible ensayo misilístico que realizaría el gobierno de Norcorea.
Varias fuentes informaron que la administración surcoreana manifestó claramente su angustia sobre las actividades de misiles norcoreanos, después de que se percataron movimientos relacionados al lanzamiento de modelos mejorados de los misiles Daepodong 1 y Daepodong 2. Se estima que el mensaje fue enviado en mayo, pero se desconocen cuáles fueron los canales de contacto y su contenido.
Las autoridades gubernamentales de Surcorea dijeron estar realizando un seguimiento de los movimientos observados en Corea del Norte, así como la verificación de los mismos. Asimismo, remarcaron que la administración está tomando las medidas necesarias con la seriedad que se merece este asunto y manteniendo firme la postura de que los proyectos de cooperación económica intercoreana, de carácter privado, no deberán ser interrumpidos por ningún motivo.