El Panda World del parque temático Everland, ubicado al sur de Seúl, vivió cierto ambiente de tristeza tras darse a conocer la inminente partida hacia China de Fu Bao, la primera panda gigante nacida en Corea del Sur. El motivo de su marcha es que todos los pandas nacidos en el extranjero deben retornar a China entre los dos y los cuatro años para ser incluidos en programas de reproducción. La última vez que pudo ser vista por el público en Everland fue el 3 de marzo de 2024. Ese día, antes de que el parque de atracciones abriera sus puertas, ya había colas de más de 2.000 personas frente a la taquilla, para poder ver por última vez a la osita. Algunos incluso llegaron a esperar varias horas, con un récord que llegó a 400 minutos. 

Fu Bao, nació en el parque de atracciones Everland, ubicado en Yongin, provincia de Gyenggi, en julio de 2020. El comienzo de esta historia se remonta a 2014 cuando el mandatario chino Xi Jinping anunció durante una visita a Seúl que Beijing regalaría una pareja de pandas gigantes a Corea del Sur como gesto de amistad. Ai Bao, una hembra de dos años, y Le Bao, un macho de tres años, llegaron a Corea en marzo de 2016 y desde entonces tuvieron tres crías: la primogénita Fu Bao en 2020 y las hermanas gemelas, Rui Bao y Hui Bao en 2023. Desde que nació Fu Bao, la mayor, se convirtió en una gran estrella en Corea, pues los videos mostrando sus actividades del día a día, robaron el corazón de pequeños y grandes. Uno de los más adorables es en el que se ve a la osita cuando apenas tenía unos meses de edad agarrando la pierna del cuidador del zoo para que no se fuera, aunque también destacan otros de 2023 donde se la ve dando vueltas y deslizándose sobre la nieve. Sin embargo, ya no será posible verla más en Corea pues pronto viajará al país natal de sus padres, antes de cumplir cuatro años de edad, de acuerdo con las normas de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES). El viaje de Fu Bao a China está programado para abril de 2024 con destino al Centro de Investigación y Conservación de Pandas en la provincia de Sichuan, y muchas personas acudieron al parque temático para despedir a la pandita, tan querida por todos, e incluso a algunos se les llenaron los ojos de lágrimas.

Quizá haya gente que piense en qué tienen de especial los pandas o por qué ha generado tanto revuelo emocional la despedida de Fu Bao. Sin embargo, basta ver a tan adorables animales comiendo bambú, trepando a los árboles o simplemente sin hacer nada, para sentir una fuerte conexión emocional con ellos. Por eso Fu Bao no es solo una osita del zoo, sino más bien una estrella que ha enamorado al público coreano con su irresistible encanto. De hecho, la ternura e inocencia de Fu Bao ha sido fuente de consuelo, relajación y alivio de muchas personas que estos días sienten cansancio ante el acelerado ritmo de una vida moderna frenética y estresante. Fu Bao ha sido una de las grandes estrellas de la vida de Corea desde que nació, y tras la noticia de su partida, no han parado de llegar mensajes de tristeza, ánimo y agradecimiento por el imborrable recuerdo que deja en nuestros corazones. Entre los mensajes enviados para despedir a nuestra querida osa panda, que se marcha para siempre a China, muchos expresaron su deseo de que pueda adaptarse bien y hacer buenos amigos. Entre otras dedicatorias escribieron: “conocerte ha sido un milagro para mí, muchas gracias por todo Fu Bao”.